El martes éramos informados del fallecimiento de un trabajador atrapado en una máquina en la empresa Industrias Químicas del Ebro. Desde la Juventud Comunista y El Partido Comunista de España en Aragón (PCE Aragón) queremos trasladar, tanto a la familia como a la plantilla de esta fábrica, nuestro más sentido pésame y solidaridad por lo ocurrido.
Nadie debería perder la vida en su puesto de trabajo, de ahí que sigamos exigiendo todas las medidas de protección y salud laboral que garanticen la seguridad al conjunto de las y los trabajadores, que vemos amenazada nuestra vida por falta de celo de quién tristemente incumple y nos mata cuando tienen la obligación de protegernos.
La precariedad laboral nos sigue matando